CUANDO RAMALAZOS DE ODIO
I
nublan mi mirada.
Cuando la soledad me oculta,
con sus fauces de baba,
no encuentro cauce
para este río seco.
Negados los vocablos
era una nube de silencio,
fría y negra como noche de enero.
Exangüe hoguera donde arden
últimos rescoldos de aquella fortaleza.
Escenario frágil, mi cuerpo cruje
bajo el peso implacable
de imperativos fantasmas.
grito a punto de romper todos los cristales.
Tedio, gris herrumbre
terreno impropio para que la herida cicatrice.
La muerte me arrastró a lugares tenebrosos,
desolada locura atrapó mi alma
en pleno remolino.
Atropellan los recuerdos y una especie de culpa
opaca este paisaje que huye de la luz.
Roí la soledad, la trituré.
De “Vengo de un país”
No hay comentarios:
Publicar un comentario